Red Nacional de Apoyo y Soluciones para Adicciones

100% discreción. Tel GRATUITO.


900 525 727

Cómo ayudar a un alcohólico: “Quizás sea la adicción de la que más gente sale”

Artículo actualizado:
Publicado:
Home Blog Entrevistas a especialistas Tratamientos Cómo ayudar a un alcohólico: “Quizás sea la adicción de la que más gente sale”
familiar que busca cómo ayudar a un alcohólico

Graciela Angood Paredes, especialista en adicciones, explica el tratamiento del alcoholismo

Sobre el autor o la autora de las respuestas de este contenido:

Psicóloga especialista en adicciones | Web | + artículos

Consejos para saber cómo ayudar a un alcohólico o una alcohólica que no reconoce su enfermedad:

  1. Acudir como familia a un/a profesional especializado en adicciones que analice y guíe el caso.
  2. Mantener la unión familiar frente a la enfermedad y un mismo criterio: la persona adicta debe tratarse como única opción.
  3. Cuanto más informada y consciente del problema esté toda la familia de la realidad de su familiar, será mejor para ayudar a que esta persona tome consciencia.
  4. Nunca ocultar a otros/as familiares la enfermedad ni sus consecuencias para proteger a la persona adicta por miedo o pena…
  5. No hacerse cargo de las consecuencias de los actos de la persona adicta para evitarle sufrimiento.
  6. Informar a la familia extensa sobre la realidad de la enfermedad: no esconderla en el ámbito privado por vergüenza, pues se trata de una patología como cualquier otra.
  7. Mantener siempre la firmeza frente a la negativa de la persona alcohólica: la única opción es que inicie un tratamiento.
  8. Instar a la persona a acudir a tratamiento, acompañándole, incluso bajo presión, a un/a profesional.
  9. Actuar como equipo frente a la adicción para incitar a la persona enferma a iniciar un tratamiento.
  10. No desistir si la persona abandona a la primera el tratamiento. Si esto ocurre, lo cual es frecuente, hay que intentarlo varias veces.
  11. Acudir al profesional como familia para que os asesore sobre cómo presentarle el tema a la persona adicta o qué estrategia emplear para que inicie tratamiento.
  12. Alejar a la persona del entorno en el que desarrolla su adicción: amistades, contactos, lugares…

Cómo ayudar a un alcohólico o una alcohólica: la clave consiste en que la familia actúe unida y con firmeza frente a la enfermedad y sus consecuencias, para incitar a la persona adicta a que acuda a tratamiento como única opción.

Psicóloga especialista en cómo ayudar a un alcohólico
La psicóloga Graciela Angood Paredes en su consulta de Oviedo. Desde allí explica a Adictalia cómo ayudar a un alcohólico.

ENTREVISTA CON UNA ESPECIALISTA EN ADICCIONES SOBRE CÓMO AYUDAR A UN ALCOHÓLICO

Graciela Angood Paredes

– ¿Cuáles son las consecuencias del alcoholismo, además del deterioro de la salud?

Entre las consecuencias del alcoholismo, además de las físicas, tenemos las familiares. Como todas las adicciones, ésta crea un problema familiar muy importante porque desestabiliza todo el sistema de relaciones y produce mucha carga emocional. Una carga que deriva en discusión, conflicto. 

La familia enferma a la vez que enferma la persona con el problema de alcohol. 

Al principio, la familia normaliza el hábito de la bebida de su familiar, se va “acostumbrando”, buscando mecanismos de engaño y autoengaño.

Los pensamiento y frases típicas de familiares de alcohólicos son: 

  • “Bueno… bebe pero poco” 
  • “Son los demás quienes le llevan a beber o le obligan”,
  • “Son las circunstancias por las que pasa”… 

Así justifican su conducta. Pero llega un momento en que a la familia también le cuesta gestionar un este tipo de situaciones, porque las consecuencias y actitudes de la persona que bebe son difíciles de manejar.

– Las consecuencias familiares del alcoholismo son realmente graves…

Hay mucha carga emocional, muchas relaciones de dependencia: lo que se llama codependencia de esa persona y sus problemas. Esta es otra enfermedad donde, por ejemplo, cuando la persona con problemas de alcohol mejora, la persona que ejerce como cuidadora o apoyo, empeora.

Se dan también muchas relaciones familiares de amor-odio. En estos casos, no odian a la persona con problemas con el alcohol, sino al alcohol, al objeto de la adicción, o, incluso, en lo que se ha convertido esa persona desde que bebe.

– ¿Qué puede hacer la familia cuando la persona no reconoce que tiene una enfermedad? ¿Cómo ayudar a un alcohólico que se resiste?

Hay distintas estrategias. Se da con frecuencia el caso de familias que acuden para pedir información y ver en su caso qué pueden hacer. Siempre recomiendo que, cuanta más unión, mejor.

Es decir, que cuantos más miembros de la familia sepan cuál es la situación y las circunstancias (todo eso que la familia vive en privado y la familia extensa desconoce) salga a la luz, más se beneficia la familia y a la persona enferma. Más se facilita que el o la adicta se pongan en tratamiento.

Porque la enfermedad de la adicción al alcohol se beneficia de que la mantengan en privado


Cuanto menos se hable y se toque el tema, menos reacción vamos a obtener por parte de la persona adicta al alcohol.

Graciela Angood Paredes, psicóloga en adicciones

– ¿Por qué el silencio familiar colabora con el alcoholismo?

– Porque mientras los demás ignoran el problema, la persona adicta va a poder seguir haciendo de las suyas; porque va a haber menos gente que esté pendiente, que hable con ella, que le presione, que le ponga un poco entre la espada y la pared. Menos personas que le hagan reaccionar.

Es decir, cuanto menos se hable y se toque el tema, menos reacción vamos a obtener por parte de esa persona. En definitiva, menos conciencia por su parte del problema y más posibilidades de que se auto engañe con frases y pensamientos del tipo: 

  • No pasa nada, 
  • Bebo como los demás, 
  • Esto es normal, 
  • Yo controlo…
Estadísticas de alcohol en adolescentes
Estadísticas oficiales sobre el consumo de drogas en adolescentes. Muchas familias de jóvenes llaman a Adictalia buscando saber cómo ayudar a un alcohólico.

QUÉ PUEDE HACER LA FAMILIA DE LA PERSONA CON ALCOHOLISMO

Consejos sobre cómo ayudar a un alcohólico

– ¿Qué sugieres a las familias cuyo día a día es encontrar la clave sobre cómo ayudar a un alcohólico, a su familiar con adicción?

Por un lado, que se junten varios miembros de la familia para decirle y ponerle en frente lo que ellos están viviendo con el problema de alcohol. 

Por otro, acudir a un profesional que les pueda guiar en su caso personal y particular.


La mayoría de las veces la persona alcohólica no se pone en tratamiento a la primera

Graciela Angood Paredes, especialista en adicciones

En ocasiones, las personas adictas vienen “cogidos de la oreja”, obligadas. Es otra táctica a tener en cuenta, también. Y no por eso hay peor pronóstico. Es un primer paso para que esa persona ya cuente en su historia de vida con que acude a un profesional obligado por su familia para ponerse en tratamiento.

La mayoría de las veces la persona alcohólica no se pone en tratamiento a la primera

La persona ha de encontrarse en una etapa en que esté preparada para el cambio, para hacer “lo que tiene que hacer” para salir de la adicción. 

– ¿Qué recomiendas cuando la persona adicta abandona?

Como profesional, diría a las familias que no desistan. Si han ido una vez con la persona a tratamiento y ésta abandonó, deben insistir, ir varias veces a tratamiento. No hay que desistir. No siempre a la primera se consigue que la persona se trate. Hay veces que sí y otras que no. Pero en todo caso, que no desistan, que lo intenten varias veces.

– ¿Es más frecuente que las personas adictas acudan obligadas a tratarse? 

Aquí vienen más por motu proprio o acompañados con la familia. Quizá porque ya han pedido ayuda y se ven tan mal que no les queda otra. Otras veces, porque la familia ya no puede más y pactan: “Si tú dices que no tienes un problema y yo digo que sí, pues vamos a ir a un profesional que nos va a decir si efectivamente tienes o no un problema”. 

En el tratamiento ambulatorio privado, la mayoría de los casos es gente que viene por alguno de esos dos motivos. En otro tipo de tratamientos es diferente, hay más casos en que van obligados. Aquí principalmente vienen porque ha habido cierta motivación, es decir: un “voy a ir para que veas que no tengo un problema”. Pero vienen.

CUÁNDO SE DIAGNOSTICA ALCOHOLISMO

Los criterios para determinar la adicción al alcohol

– ¿Cuándo decimos que una persona es alcohólica y necesita ayuda?

Hay unos criterios clínicos, que los marca el manual de diagnóstico de la APA (Asociación Americana de Psiquiatría), conocido como DSM. Si la persona responde “sí” cuando se le pregunta sobre estos aspectos, nos va a indicar que tiene un problema de dependencia, de abuso o de adicción al alcohol. 

Entre estos factores podemos enumerar, cuando una persona ha intentado dejarlo varias veces y no puede; cuando toda la gente que tiene alrededor es consciente de que esa persona bebe de una forma no adaptada o “normal” y la persona que bebe no se da cuenta.

Asimismo, cuando el beber le causa problemas sociales (aislamiento, conflictos con la ley, multas de tráfico) o problemas de salud (por ejemplo, tener medidores hepáticos alterados). Cuando genera problemas familiares de riñas, discusiones, aislamiento, dificultades, pérdidas de empleo… Y cuando la propia persona tiene un sufrimiento que calma a través del beber.

También puede ser porque tenga síntomas de depresión y bebe alcohol para calmarlos, ocultarlos. 

Por otra parte, hay personas que utilizan el alcohol para divertirse cuando salen porque tienen cierta timidez, introversión y, de esa manera, se atreven a hacer cosas que no se atreverían de otra manera. Es decir: cuando una persona empieza a utilizar el alcohol porque no es capaz de superar ciertos aspectos de su vida que fallan o no van bien. Pero al final este hábito termina causándole problemas en otros ámbitos de su vida, como en el social.

– ¿A la gente le cuesta reconocer cuándo se encuentra frente a un problema de alcoholismo?

Es un punto un poco difícil de entender para la gente que es ajena al campo de las adicciones. Por eso muchas personas tardan en pedir ayuda cuando tienen un problema de alcohol. 

Cuando preguntas a la gente para hacer la historia clínica, dicen que hay un momento a partir del cual fueron conscientes de que la forma de beber ya no era igual y se había convertido en un problema. Sin embargo, muchas veces ese problema viene de antes incluso.   

Sabemos que se tarda una media de 10 a 12 años en pedir ayuda, son muchos años mal vividos e incluso a veces medio perdidos. Muchos años.

Por otra parte, hay que tener muy claro que hay distintos tipos de personas con problemas de alcohol. No siempre se trata de esa persona que bebe mucho o que gasta mucho dinero o que crea conflictos en casa… Hay otra serie de factores que también determinan que esa persona tenga un problema, que escapan a los más clásicos o típicos que se reconocen.

¿TRATAMIENTO AMBULATORIO O INGRESO EN CENTRO?

Cómo se determina el proceso de recuperasión de la persona adicta

– Cuando buscamos cómo ayudar a un alcohólico, ¿qué diferencia hay entre un tratamiento ambulatorio y otro en un centro de desintoxicación?

Un tratamiento ambulatorio sería lo que hago yo: una sesión a la semana, un contacto telefónico o un seguimiento entre consulta y consulta. Un tipo de tratamiento más intenso, como sería un centro de rehabilitación o una comunidad terapéutica, es un lugar donde la persona alcohólica reside durante una temporada (3-5 meses).

– ¿Cuándo una persona necesita ser ingresada por un problema de alcoholismo?

Hay varios criterios: uno de ellos es la imposibilidad para mantener la abstinencia (no es capaz de estar sin beber). A veces ha intentado incluso tomando algún interruptor alcohólico, como el Antabus o el Colme, pero, aun así, le es imposible. Y puede ser peligroso para la persona beber con esa medicación. 


Cuando la persona alcohólica se encuentra muy deteriorada física o psicológicamente también necesitan ser ingresadas en un centro. 

Graciela Angood Paredes, especialista en adicciones

Otro criterio para ingresarla es cuando no tiene un soporte familiar, es decir: personas que puedan estar pendientes de ella, que puedan acompañarla en su tratamiento, supervisarla. Es el caso de quienes viven solas y carecen de alguien que pueda encargarse de ellas. 

– Es decir, cuando no puede dejar de beber y está sola…

– Sí. También cuando es una persona cuyo hábito de ocio sea exclusivamente beber y no podamos tener una seguridad de que vaya a mantenerse abstinente.

Cuando la persona alcohólica se encuentra muy deteriorada física o psicológicamente también necesitan ser ingresadas en un centro. 

Ahora bien, incluso en estos casos, lo que yo suelo hacer es requerir el apoyo por parte de algún miembro de la familia para hacer un intento de tratamiento ambulatorio con muchas restricciones. Esto significa: pautar muchas normas para que la persona tenga una oportunidad de tratarse por sí misma sin ingreso, con el apoyo o los recursos que posee. Pacto con ese paciente que, de no ser posible tratarse de esta manera, deberá ser ingresado en una comunidad terapéutica, clínica psicológica, psiquiátrica… un entorno más intenso.

EL TRATAMIENTO AMBULATORIO PARA EL ALCOHOLISMO

Cómo ayudar a un alcohólico cuando no requiere ingreso en un centro

– ¿En qué consiste un tratamiento ambulatorio para una persona con alcoholismo?

Consiste en que la persona acuda 1 ó 2 veces a la semana a consulta con un/a psicólogo/a. A la vez pueda tener terapia familiar y, paralelamente, que sus familiares cercanos tengan un soporte psicológico para ir aprendiendo acerca de lo que es el alcoholismo. Esto es: acerca de lo que hay que hacer, qué apoyo tienen que darle a su familiar adicto, cómo pueden gestionar las situaciones en casa con esa persona.

Durante el tratamiento, la persona que sufre alcoholismo tiene una serie de normas y límites a cumplir. Estos van a permitirle que pueda mantener, en la medida de la posible, la abstinencia total al alcohol, que es un requisito primordial para el tratamiento ambulatorio.


Las familias que se pregunta cómo ayudar a un alcohólico han de saber que durante el tratamiento ambulatorio, la persona que sufre la adicción tiene una serie de normas y límites a cumplir. Si ésta no lo hace debe ser ingresada.

Graciela Angood Paredes, especialista en adicciones

En el caso de que no pueda mantener la abstinencia y cumplir las normas, contemplamos la opción de tomar algún interruptor alcohólico. En este caso, siempre supervisado por su médico/a privado o de atención primaria, que le prescribirá Antabus o el Colme. Este profesional le indicará analíticas de sangre para controlar su estado y los efectos físicos que le pueda producir este fármaco.

– Cuando se trata de cómo ayudar a un alcohólico, ¿qué aspectos se abordan en un tratamiento ambulatorio?

Hay varios temas importantes como son:

  • Reeducar acerca de lo que es el alcohol: qué es un problema de alcohol, qué efectos produce (físicos, psicológicos, sociales y familiares), 
  • Tratar los aspectos personales que lo han conducido a beber, 
  • Cuál es la trayectoria personal: cuándo empezó, de qué manera fue, cómo utiliza el alcohol, cómo lo ha instrumentalizado; es decir: para qué lo usa y para qué le sirve.
  • Cómo vamos a sustituir este hábito 
  • Cómo enfrentar todos los efectos que va produciendo dejar el alcohol: el duelo, la pérdida de relación con el alcohol, cómo va a superar ese vacío que deja, 
  • Cambiar hábitos sociales, de ocio, 
  • Si ha perdido el empleo, un poco más adelante se empezará a trabajar el recuperar esa parcela, 
  • Trabajar en la mejora de su autoestima para que vaya mejorando todos los aspectos de su vida. 

Es decir, que el tratamiento del alcoholismo debe ser integral, no solo dejar de beber. Tocamos distintos aspectos que hay que recuperar, los cuales van desde el aspecto neurobiológico (el sistema de recompensa cerebral que es la base de la adicción) a otros más exteriores: tipo sociales y de ocio. Se trata de un tratamiento general de todos los planos de la persona.


El tratamiento del alcoholismo debe ser integral, no solo dejar de beber. Tocamos distintos aspectos de la persona que hay que recuperar.

Graciela Angood Paredes

– ¿Podemos definir un perfil de persona alcohólica en España?

La mía, como es una consulta privada de tratamiento ambulatorio, recibe gente que tiene un nivel económico  que se lo puede permitir. Sin embargo, también he trabajado durante varios años en centros de tratamiento de ingreso y comunidades terapéuticas, centros de día y unidades de alcoholismo. Allí había otro tipo de perfiles en plazas concertadas y subvencionadas por distintos organismos.

Encontramos muchos perfiles con patologías duales, que cada vez se dan más. Es decir: personas que tienen un problema de adicción al alcohol y otro tipo de trastorno psiquiátrico o psicológico. El alcohol tiene una comorbilidad muy alta, por ejemplo, con los trastornos depresivos, que es es lo que más vemos.

Jóvenes con problemas de alcohol
Comprender que el alcoholismo está presente en todas la edades y estratos sociales es fundamental para saber cómo ayudar a un alcohólico o una alcohólica. Foto: Diego Indriago from Pexels.

– ¿El alcoholismo afecta a personas de edades determinadas?

– No. El alcoholismo existe en todas las edades. Desde los jóvenes a partir de 18 años, o incluso antes. Actualmente está de moda el binge drinking: atracón de alcohol en la calle (que ahora está más frenado por las restricciones frente a la COVID-19). La media de edad en que se prueba alcohol está hoy alrededor de los 10 años.

Vemos también a personas mayores que llevan toda la vida bebiendo porque social y culturalmente es lo que han aprendido: la primera vez que bebieron tenían entre  5 y 7 años. Normalmente les han dado a probar su madre, su tío, su abuelo en nochebuena o nochevieja.


Estamos asistiendo a un incremento en gente que cumple con las medidas contra el coronavirus y que consume en casa cada vez más.

Graciela Angood Paredes, especialista en adicciones

También tenemos una franja de gente de mediana y avanzada edad quienes beben de forma social. Y que ahora mismo no lo hacen tanto porque no se puede salir, aunque siguen teniendo ese problema del alcohol. 

Por otra parte, estamos asistiendo a un incremento en gente que cumple con las medidas contra el coronavirus (restricciones, autoconfinamientos y demás) y que consume en casa cada vez más. Asimismo suben los casos entre quienes se dedican a jugar, porque va unido el consumo de alcohol al juego de apuestas online y de consolas.

Cultural y económicamente, el alcohol está metido en todos los escalafones sociales en España.

FÁRMACOS PARA TRATAR EL ALCOHOLISMO

MEDICAMENTOS QUE AYUDAN, AUNQUE SON UNA PIEZA MÁS DE UN PROCESO INTEGRAL

– ¿Qué es el tan mencionado Antabus?

El Antabus es un fármaco que funciona como un interruptor alcohólico. Es decir: una persona que está en tratamiento con Antabus, si bebe sufre una reacción física adversa, como

  • Taquicardia 
  • Irritación en el rostro 
  • Manchas en la piel
  • Diarrea
  • Nerviosismo

¿Qué peligros presenta el Antabus?

– He visto gente que tenía reacción a este fármaco simplemente con ingerir el vinagre de la ensalada o por echarse after shave o colonia. Hay otras personas que consumiendo Antabus bebían para probar si les hacía efecto, con sus consecuencias. Al fin y al cabo el Antabus es una sustancia que se utiliza para que la persona no beba, y si bebe, le produce un efecto muy negativo.

Solo por el hecho de tomar Antabus sufren un efecto adverso que les quita las ganas de beber. Así que, como saben que se pueden poner muy malos, reprimen las ganas de beber

Pero realmente, para quitar las ganas de beber o frenar el craving hay otro tipo de fármacos como el Acamprosato, que es diferente. Y hay otras sustancias más modernas también. El Antabus siempre tiene que ser prescrito con mucho cuidado porque no sabemos el efecto que le puede producir a la persona. Siempre ha de ser ingerido bajo supervisión, no lo puede tomar la persona por sí misma. 

Por otra parte, es importante que se lo administre una persona de la familia. Porque a veces lo que hacen es “no lo tomo” para dejar una puerta abierta a beber, ya que el efecto no dura una semana. Tiene que ser administrado por un familiar y su efecto en caso de que beba, siempre supervisado por un/a médico/a.

– ¿El hecho de aplicar un fármaco significa que la persona puede no tener que seguir un tratamiento psicológico?

Hay corrientes que dicen que hay determinados casos de alcoholismo que se curan por sí mismos, con la simple decisión de dejar la bebida. Yo pienso que siempre hace falta una supervisión, un control o apoyo por parte de un profesional en personas con consumo de alcohol

En los primeros casos cabe preguntarse: ¿esas personas fueron diagnosticadas de alcoholismo? No. ¿Tenían alcoholismo? No lo sé. Es decir, que no sabemos si tenían alcoholismo y lo dejaron por sí mismas o tenían una conducta de abuso de alcohol, sin llegar a ser tan severa como el alcoholismo, y la cortaron. Por tanto, ¿el resto de personas que tienen un problema con el alcohol necesitan ayuda? Sí, siempre una ayuda es necesaria.

– ¿El uso de fármacos es determinante cuando se trata de cómo ayudar a un alcohólico?

Es un apoyo. Es como cuando un niño empieza a nadar y le pones una burbuja para que flote hasta que aprenda a estirarse, a darle a los pies y a los brazos. Cuando aprende a flotar le quitas la burbuja y ya sigue solo. 

Los fármacos sirven para apoyar a personas que tienen un craving muy fuerte y no van a poder mantener la abstinencia. 


La necesidad de fármacos para el alcoholismo siempre la tiene que determinar la o el profesional médico.

Graciela Angood Paredes, psicóloga especialista en adicciones

O personas que tienen mucho miedo a volver a beber una vez que lo han dejado y con el fármaco se sienten más seguras. Porque por lo menos al principio saben que no van a consumir para evitar la reacción adversa. 

Entre éstas, están aquellas que los quieren tomar porque saben que va a ser más fácil o que encuentran un “apoyo externo” de algo que les va a producir un efecto concreto si beben. Sienten que esto les ayudará a mantenerse abstinentes al principio hasta que hayan avanzado en el tratamiento y tengan la capacidad suficiente como para seguir sin beber por sí mismas. 

Pero la necesidad de fármacos para el alcoholismo siempre la tiene que determinar la o el profesional médico.

– A aquellas personas que buscan cómo ayudar a un alcohólico, ¿les dirías que es posible salir del alcoholismo?

Sí, todas las personas y familias de personas que tienen un problema de alcohol, y que saben la auténtica tortura que esto implica, deben saber que es posible salir de esta realidad. Un porcentaje bastante alto de personas con problemas de alcohol sale. De hecho, es la adicción de la que más gente sale… Así que les sugiero que no dejen de intentarlo. 

Si son familiares, que pacten con la persona alcohólica, que hablen y que les lleven a tratamiento. Que vayan a un profesional que determine si tiene un problema y cómo le pueden ayudar. Incluso, que pidan ayuda por sí mismas antes de llevar a la persona adicta a tratamiento, para que un profesional les indique cómo pueden hacer para ayudarle.

Y a las personas que tienen un problema de alcohol les aseguro que es posible vivir sin la bebida.

La gente que he asistido y que lo ha dejado siempre dice: “¿Cómo no lo habré hecho antes?”. Y es que, vida sólo tenemos una y no merece la pena vivirla así. Con ayuda y esfuerzo se puede salir de esta enfermedad. Les animo a que lo intenten y que lo hagan.

Tratamiento del alcoholismo

Cómo ayudar a un alcohólico con terapia cognitivo conductual y psicodrama

Graciela Angood Paredes ejerce de psicóloga desde hace 23 años en el ámbito de la psicología clínica (ver ficha profesional en el directorio) en Oviedo. Es una especialidad que le apasiona y a la que piensa dedicarle mucho más tiempo de su vida, asegura.

– ¿En qué ramas de la psicología te has especializado?

Yo me metí por la rama de clínica (lo que son tratamientos y psicoterapia). Y cuando estaba terminando los estudios, hice un curso de formación en adicciones. A partir de ahí, desde el 98, me dedico íntegramente a esta enfermedad.

– La corriente psicológica que más se emplea en España para tratar las adicciones es la conductista-conductual. ¿Qué la caracteriza?

Sí, es la que da mejores resultados. La que está más estudiada en el campo de las adicciones porque trabaja mucho el ámbito cognitivo, de cambio de pensamiento, de cambio de la forma de pensar. Con este tratamiento se puede producir una reestructuración cognitiva, que es un aspecto que se deteriora cuando una persona cae en una adicción. 

Y a la vez trabaja el ámbito comportamental o conductual, que es un aspecto que también se modifica mucho y que determina que una persona pueda llegar a cronificar el consumo de sustancias o una adicción sin sustancias.

Yo también combino el tratamiento cognitivo conductual con otro, que es el psicodrama. Éste trabaja la parte emocional que produce la entrada de la persona en este problema que termina siendo una enfermedad. Una enfermedad que no solamente afecta al paciente que consume sino también se extiende al ámbito familiar, social, relacional…

El psicodrama trabaja la parte emocional y la parte de las relaciones con sustancias, con el objeto de la adicción, relaciones con la familia y otros ámbitos de la persona

– ¿Qué tipo de perfiles de personas con alcoholismo acuden a su consulta?

Recibo todo tipo de personas que quieran ponerse en tratamiento o quieren tener una información de qué es lo que hay que hacer o en qué situación está su problema de alcohol. Incluso gente que no es consciente de que tiene un problema y la trae la familia, para que les haga una valoración, un diagnóstico. Una vez aquí, determino si esa persona necesita un tipo de tratamiento u otro.


¿Quieres informarte y seguir aprendiendo sobre el mundo de las adicciones? ¡Síguenos!

Si quieres comentar algo sobre el artículo «Cómo ayudar a un alcohólico», hazlo aquí debajo

28 respuestas a “Cómo ayudar a un alcohólico: “Quizás sea la adicción de la que más gente sale””

  1. Maria Sabina Chávez dice:

    Hola. Soy Maria Sabina de Honduras.. Tengo un hijo alcohólico y drogadicto. La estoy pasando muy mal en estos momentos porque a diario se esta emborrachandoy lo peor del caso es que me exige dinero y es muy agresivo cuando anda drogado o alcoholizado. El fue diagnosticado bipolar y soy la unica persona que lo sufre, es el menor de mis cuatro hijos, hemos sufrido violencia doméstica y yo he adquirido una enfermedad por la que tuve que dejar mi trabajo, causada por estrés, y este problema de mi hijo me tiene peor ya que la depresión me tiene mal. Me gustaría me ayudes ya que la verdad no puedo tratar a mi hijo de forma privada. Dios te bendiga siempre.

    • Adictalia dice:

      Hola, María, lamentablemente no operamos en Honduras, solo en España. Te sugerimos que te dirijas a un centro de salud o un profesional.

  2. Margarita dice:

    Hola. Tengo 44 años y hace diez meses que dejé de beber.
    La primera vez que me emborraché tenía 12 años. Desde entonces no he dejado de beber. En febrero de este año creo que toqué fondo y sabía que no podía continuar de esa forma. En un mes sin beber empecé a notar la mejoría, tanto psicológica como física. Después de estos diez meses mi vida ha dado un giro de 180 grados. Me siento genial, he recuperado las ganas de vivir y soy plenamente consciente de mis actos y mis sentimientos y en cómo me relaciono con el mundo.
    Nunca he pensado que era una mujer fuerte,de hecho bebía para anestesiar el dolor que me producían las cosas negativas que me sucedían, pues no tenía herramientas para asumirlas ni superarlas. Y así he vivido durante 30 años. Anestesiada.
    Ahora puedo decir que soy feliz. Nunca he sido tan «yo».
    Animo a las personas que están tratando con este problema tanto de forma directa como indirecta. Me gustaría decir que se sale de esto y que merece tanto la pena… Yo he comenzado a vivir.
    Gracias y un abrazo.

    • romina Cavalieri dice:

      Hola Margarita te leo y es como si estuviera escribiendo mi marido, esta con este problema hace muchos años pero tomamos conciencia del mismo hace tres, ya no sabemos con mis hijos como sostenerlo. Desde que le dije que me quiero separar empezó a ingerir más y a sentirse más depresivo aún. Su psicólogo le dijo que solo le queda internarse para intentar dejarlo y todavía no logra tomar la decisón. Además de esto, hace tres días se murió mi mamá a quien le oculté plenamente todo lo que estoy viviendo. Creo que ella me dejó el camino para poder ayudarlo sin tener que hacer esfuerzo en ocultarle a ella lo mal que la estamos pasando.

    • Adictalia dice:

      Enhorabuena, MArgarita, por este gran paso en tu vida, quizá el fundamental. Y muchísimas gracias por tu testimonio.

  3. Joaquín dice:

    Excelentes reflexiones ,se hacen más difícil ,cuando es dual como mi caso TB1 Alcohol reconocido estuve abstemio ovbio los porqués judiciales todos a mi favor me enterró la familia al completo incluyendo los padres desde la infancia gracias a la mia vivo soy veterano y un buen paciente

  4. María dice:

    Hola, soy María hace 15 años que convivia con mi pareja que es alcohólico, el ahora tiene 50 años, y hace dos meses me separé de él por reiteradas infidelidades, malos tratos, falta de ayuda en el hogar, y creo que todo lo causó el alcohol y la relación con personas viciosas y promiscuas, me duele mucho que no quiera reconocer su adicción, intente ayudarlo todos estos años pero no lo logré, me terminé enfermando yo de depresión y comencé un tratamiento y deseo que el también lo haga por el que lo está perdiendo todo, por mi, mi hija y nuestros nietitos que lo Aman tanto, como puedo hacer para sanarnos de este mal?
    Gracias

  5. Jose dice:

    Hola, buenas,
    Mi hermano de 48 años tiene muchos años bebiendo y ya no sabemos que hacer. La situación es más difícil porque no es de España y por lo tanto no tiene tanta presión por parte de la mayoría de familia.
    Ha intentado hacer tratamiento, y todos han sido abandonados.
    Yo, su único hermano en Madrid, me siento muy impotente y derrotado.
    Un saludo y ánimo para todos.

Ver más comentarios

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

El teléfono NO es obligatorio. Sólo si necesitas que te llamemos.

Artículos relacionados

Chemsex: 8 cosas que debes saber

Una modalidad adictiva creciente entre parte de la población LGTBI


Categoría: Adicción, Tratamientos
Artículo actualizado:
Publicado:

Leer más

Cómo es un tratamiento para dejar la cocaína

Todo lo que debes saber sobre una terapia para dejar la coca


Categoría: Adicción, Tratamientos
Artículo actualizado:
Publicado:

Leer más

¿Por qué realizar la desintoxicación en un centro lejos del lugar de residencia?

Por qué importa la ubicación geográfica de la clínica para adicciones.


Categoría: Tratamientos
Artículo actualizado:
Publicado:

Leer más

Existe una solución para ti


900 525 727